LA ASAMBLEA DE MUJERES DE GRANADA Y SU COMISIÓN DE LESBIANISMO
(AMG)
1976
En el contexto de emergencia de los movimientos sociales, políticos y sindicales a finales del Franquismo y principios de la Transición se localiza el surgimiento de la Asamblea de Mujeres de Granada. Se constituye en 1976 por diversas activistas del Partido Comunista, del Movimiento Comunista y otras que encontraron en la AMG su primera experiencia militante.
La AMG se integró en la Coordinadora de Organizaciones Feministas del Estado Español en 1977, se articuló con las mujeres de los pueblos de la provincia y en la Coordinadora Andaluza de Organizaciones Feministas. Desde sus inicios hasta la actualidad, ha sido un grupo muy visible y activo a través de las diferentes reivindicaciones, acciones y campañas desarrolladas en la ciudad de Granada, y se ha ido nutriendo de los diferentes debates que ha ido generando el movimiento feminista en sus años de vida: anticonceptivos, divorcio, la sexualidad de la mujer, el aborto, el trabajo doméstico, la mujer joven, la familia…
De esta forma, a lo largo de su desarrollo se plantearon una serie de objetivos entre los que se pueden destacar: la lucha por la abolición de la explotación que sufren las mujeres y la crítica al sistema patriarcal, el cuestionamiento de los mitos y prejuicios que existen hacia las mujeres, la ruptura de las barreras educacionales, la lucha contra los privilegios masculinos y la crítica al sistema capitalista. Asimismo, trabajaron desde la vinculación entre el pacifismo y el feminismo, la lucha antimilitarista y por la insumisión, la campaña anti OTAN, y las acciones, denuncias y manifestaciones contra las agresiones machista de distinta índole ocuparon un lugar central en el activismo de la AMG en años posteriores. Muchas de sus reflexiones y reivindicaciones se plasmaron en la revista que crearon: Menos Lobos.
En articulación con la Coordinadora de Organizaciones Feministas del Estado Español (COFEE) la AMG organizó las Jornadas Feministas Estatales de 1979 de Granada; jornadas que se han descrito como ‘históricas’ para el movimiento feminista estatal debido a la división que se produjo entre las feministas de la doble militancia y las feministas independientes, que, posteriormente, se denominaron las corrientes feministas de la igualdad y de la diferencia. Con relación a estos conflictos, la AMG se situó en el feminismo de la igualdad reconociendo la importancia que tuvo en ello la influencia de las feministas de la Ilustración y el análisis de clases.
Fue en la década de los ochenta cuando la AMG constituyó una comisión de sexualidad que, más adelante, pasó a denominarse comisión de lesbianismo, de manera afín al resto de organizaciones feministas estatales, desde donde comenzó a cuestionar la heterosexualidad como régimen político, así como la tradicional vinculación entre la sexualidad, la reproducción y la maternidad, empezaron a reivindicar el derecho al placer, la autoexploración, el clítoris frente a la penetración vaginal, la libre utilización de sus cuerpos y el derecho a una sexualidad libre. En definitiva, comenzaron a elevar la sexualidad como un asunto político. En el caso concreto de las lesbianas de la AMG entendieron que su lugar de militancia estaba dentro del movimiento feminista, priorizando de alguna forma, la opresión que sufrían por género a la opresión por sexualidad, y concibiendo su lucha a la del resto de mujeres. En este marco, de manera similar a como ocurrió en el contexto estatal, mantuvieron diversos debates en torno a las prácticas sexuales entre lesbianas, los roles en las mismas, las fantasías sexuales, la pornografía o las prácticas sexuales periféricas. Al igual que el resto de colectivos de feministas lesbianas del Estado o de las comisiones de lesbianismo de las organizaciones feministas, desde la comisión de lesbianismo de la AMG se plantearon como un objetivo prioritario la visibilidad lesbiana, tanto en el espacio público como en el interior del movimiento feminista. Para ello, comenzaron a aparecer públicamente en la ciudad, participando en la radio, escribiendo artículos en la prensa o en la Universidad. Este hecho estuvo enmarcado en una campaña más amplia por la visibilidad lesbiana en coordinación con el resto de colectivos a nivel estatal.
En la década de los noventa y en adelante, la AMG se empapa de los retos y debates que aportan las experiencias trans y queer en el seno de los feminismos. La AMG se ha posicionado a favor de los derechos de las trabajadoras sexuales y organizó, junto con el colectivo feminista local Tomakandela y en articulación con la COFEE, las Jornadas Feministas Estatales Granada, treinta años después: aquí y ahora de 2009 en Granada, donde irrumpió con fuerza el transfeminismo.
En este apartado podrás encontrar algunos materiales de la AMG en torno a la sexualidad, el lesbianismo y a las identidades diversas.
Jornadas Feministas Estatales de 1979 en Granada. AMG.
Fuente: Archivo-T
Jornadas Feministas Estatales de 1979 en Granada. AMG.
Fuente: Archivo-T
Manifestación de las Jornadas Feministas Estatales de 1979 en Granada. AMG.
Fuente: Archivo-T
Artículo ‘cuarta dimensión’ de la Comisión de Lesbianismo de la AMG. Enero 1988.
Fuente: Revista Menos Lobos, nº 0
Imagen del artículo ‘cuarta dimensión’ de la Comisión de Lesbianismo de la AMG. Enero 1988
Fuente: Revista Menos Lobos, nº 0
Imagen del artículo ‘cuarta dimensión’ de la Comisión de Lesbianismo de la AMG. Enero 1988
Fuente: Revista Menos Lobos, nº 0
Panfleto ‘Celebración 28 de junio Día Internacional del Orgullo’, de la AMG. Año desconocido (finales de los ochenta)
Fuente: Archivo AMG
Artículo sobre la I Semana Cultural de la Mujer, en el Diario de Granada. 31 de enero de 1984.
Fuente: Archivo AMG
Fuente: Archivo AMG
Fuente: Archivo AMG
Fuente: Archivo AMG
Fuente: Archivo AMG